El Lexus LFA podría tener sucesor a la vista en el largo o muy largo plazo. Esto es lo que se deduce tras las recientes declaraciones del vicepresidente ejecutivo, Mark Templin, asegurando que se cuenta con el respaldo del presidente, Akio Toyoda, para llevar adelante el proyecto. El Lexus LFA cesó su producción en 2012 tras una corta tirada de 500 unidades en dos años, caracterizándose no solo por sus prestaciones, que eran propias de los 552 CV que declaraba, sino por el inconfundible aullido que emanaba su mecánica V10 atmosférica. Pocos coches de serie de reciente producción se me ocurren que suenen tan brutalmente bien.
“Akio cree que cada generación merece tener un coche como el LFA, por lo que estamos desarrollando un LFA para la generación que tenemos hoy“. Éstas fueron las palabras de Templin durante una comparecencia previa a la ceremonia de presentación del nuevo crossover, el Lexus NX. No dio más detalles, dejando entrever que simplemente podrá llegar el momento de darlo a conocer.
La inminencia del LFA no es para nada un hecho. Tanto es así que se especula con que podrían pasar años hasta que se conozca al sucesor, dado que el LFA también fue un proyecto cuya gestación duró más de una década. Un automóvil que fue ante todo una motivación para los ingenieros y que mejoró la reputación de la marca. Su influencia se ha dejado notar en la imagen que se tiene de los modelos presentados con posterioridad. Además, permitió a la mayor compañía automotriz del mundo, Toyota, competir cara a cara con marcas como Porsche, perteneciente a Volkswagen AG, Ferrari, del grupo Fiat, o la propia Daimler AG Mercedes Benz.
Esta mejora de la imagen de Lexus se constata con el éxito que en mercados como el americano están teniendo sus modelos, colocándose