El orgullo de la estrella ha sido presentado en el Salón de Moscú. El Mercedes S65 AMG Coupé representa el más exquisito lujo rodeado de unas prestaciones de superdeportivo. Inconformistas, así fueron los de la casa de Stuttgart que han trabajado duro para enseñar al mundo una auténtica joya de cuatro ruedas.
Y la ciudad rusa ha visto su destape. Por fuera, genio entrelazado en detalles de grandeza, de esplendor. La parte frontal nos mira con los ópticos de nueva factura de la marca, y nos reta con unas tomas de aire de generosas dimensiones y una enorme parrilla que enseña el escudo de la familia. La silueta se pasea acariciando la aerodinámica hasta llegar a la zaga, rematada con dos pilotos alargados y cuatro salidas de escape además de algunos rasgos de pura deportividad.
En el interior es pura ostentación. El cuero napa envuelve los asientos, un material que está presente en prácticamente la mayoría de rincones del habitáculo. Por supuesto, no faltan detalles como los umbrales de las puertas iluminados o, en cuanto a equipamiento, un completo sistema de sonido firmado por Burmester.
El mismo Ola Källenius, responsable del área de Marketing y Ventas de Mercedes-Benz, hablaba así del S65 AMG Coupé: “El S 65 AMG Coupé encarna a la perfección todos los valores de la marca Mercedes-AMG: rendimiento, exclusividad, lujo superior e individualidad. Este es el mejor vehículo que satisfacen las demandas más sofisticadas de nuestros clientes”.
El lujoso deportivo, valorado en más de 240.000 euros en Alemania, cuenta con un potente V12 de 6,0 litros capaz de ofrecer 630 CV y unos espectaculares 1.000 Nm de par. Para gobernar todo este potencial disponemos de una caja de cambios automática 7G-TRONIC. Con todo, a esta bestia le bastan 4,1 segundos para alcanzar los 100 km/h.
Fuente – Mercedes-Benz
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