La Fórmula 1 abandona Europa para volver al continente asiático con motivo de la primera carrera nocturna completa del calendario. Se trata del Gran Premio de Singapur. El primero después de la era de Montezemolo después de que dimitiese de su cargo como presidente de Ferrari. En Singapur, los italianos tienen el deber de recuperarse de la debacle que protagonizaron en Monza, en su carrera local, y en principio el trazado debería ajustarse mucho más a las características del F14T.
Los equipos se pondrán manos a la obra el viernes a las 12 del mediodía (hora española) para desengranar este circuito urbano, último también del calendario. Un Gran Premio que volverá a presentar una elección de neumáticos agresiva con los dos compuestos más blandos. El mismo día, con motivo de los segundos entrenamientos libres a las 15:30 de la tarde (hora española) en los que deberían su primera aparición los neumáticos superblandos.
En la jornada del sábado se disputará la última práctica donde los equipos harán sus últimas pruebas de cara a la calificación. Será a las doce del mediodía (hora española). Además, esta carrera incorporará un hándicap para los equipos, ya que la nueva normativa que prohíbe el uso de la radio para dar indicaciones para mejorar el rendimiento del piloto estarán prohibidas, y es muy probable que desde el muro se la ingenien para dar mensajes cifrados sin ser penalizados por la FIA.
El mismo sábado a las tres de la tarde (hora española) empezará la calificación. De nuevo, se espera que los Mercedes, salvo sorpresa, sean los que se jueguen la pole, aunque habrá que estar pendiente de ver lo que hacen los Williams, que en Monza estuvieron muy cerca de la Flechas Plateadas de Rosberg y Hamilton. De igual modo, el rendimiento del Ferrari debería mejorar ya que a