SEAT Ibiza, un nombre que no fue fruto de la casualidad

Hubo un tiempo en que SEAT ponía a sus modelos de coches nombres relacionados con nuestro país. Ciudades como León o Toledo, monumentos como la Alhambra de Granada o islas como Ibiza se hicieron si cabe más conocidas internacionalmente gracias a la marca española de coches, que los hizo rodar por todo el mundo. Pero hoy nos vamos a centrar en el modelo más jóven de la marca española, el mismo que lidera el mercado de turismos de este año 2014. Hablamos del SEAT Ibiza, un coche cuyo nombre no fue fruto de la casualidad o del capricho del equipo de marketing de aquella época. Seguramente el nombre es también responsable del éxito de este modelo. Cuando en los años 80 SEAT lanzó un modelo más jóven y compacto que los que tenía en aquel momento, había que buscarle un nombre. Eran la época en la que el turismo en España comenzaba a proliferar después de muchos años de represión, un momento en el que la isla de Ibiza ya se había convertido en lugar de referencia para muchos jóvenes y no tan jóvenes en todo el mundo. Así pues, el nombre de la isla blanca encajaba perfectamente con el posicionamiento del nuevo modelo, que debía dirigirse a gente joven, con una imagen desenfadada y espíritu mediterráneo. Además hay otro factor a tener en cuenta. Cuando se elige el nombre de un nuevo modelo, el nombre elegido debe encajar en los idiomas de todos los mercados en los que se va a comercializar. De no ser así, habría que recurrir a técnicas como la aplicada por Mitsubishi con el Pajero, que en España se llamaba Montero. Por suerte, Ibiza encajaba en todos los idiomas y además ya era un lugar reconocido a nivel internacional, no

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