Las motos tenían dos ruedas, hasta que se inventaron los trikes y los quads. Pero la realidad es que tanto trikes como quads no pueden clasificarse como motos, al perder la agilidad y la posibilidad de inclinación que las motos sí poseen. Al menos en mi opinión. Fue entonces cuando llegó la revolución de las scooter de tres ruedas, con dos ruedas delante y una detrás. Una gran estabilidad, pero aún una gran estabilidad y mucho más de moto que de coche. El fabricante suizo Quadro da una vuelta de tuerca al concepto con su scooter de cuatro ruedas Quadro4.
Un vehículo que de verdad borra la frontera entre la moto y el coche, sin perder su carácter.
¿Qué demonios es el Quadro4?
Aunque tenga cuatro ruedas, es más moto que coche, sin duda alguna.
Un scooter de gran tamaño al que le han crecido dos ruedas más. Un chasis de scooter al que se han agregado dos conjuntos de dos ruedas, con suspensión independiente, pero que aún basa su principio dinámico en la inclinación en curva. Es más, es capaz de inclinarse hasta los 45 grados, cosa de la que muchos maxi scooter no podrían presumir. Esta inclinación es posible gracias a lo que la marca denomina Hydraulic Tilting System, un sistema de inclinación con apoyo hidráulico que evitaría la caída lateral y asiste a la fuerza del propio piloto.
Es en definitiva una gran ayuda para el piloto, que apenas tiene que hacer esfuerzo ni recurrir a técnicas como el contramanillar para lograr una gran inclinación y un rápido paso por curva. La Quadro4 tiene tracción trasera, transmitida a las ruedas por doble correa, asociada a una clásica caja de cambios CVT que no difiere de la CVT de cualquier otra scooter. Propulsando a esta scooter de cuatro ruedas, un monocilíndrico de 346