Acostumbrados a los vídeos del EuroNCAP, probablemente ya no te sorprenda ver pruebas de choque y seguridad. Pero créeme que te voy a sorprender. Volvo, en un alarde de mostrar cuán seguro es su nuevo XC90, se ha aventurado a estrellar en condiciones realistas su nuevo coche ante la prensa haciéndolo volar por los aires.
Tal vez suene a guion de Hollywood, pero lo cierto es que Volvo cuida tanto el apartado de seguridad que cuenta con sus propios protocolos, y uno de ellos son las salidas de vía. De este modo el fabricante sueco recrea una salida de vía para ver los resultados, simulando una cuneta y estudiando los resultados.
Y así ocurre. Lanzan un coche fuera de la vía, cruzando una cuneta que hace volar por los aires el coche hasta estrellarse y quedar detenido. La muestra ha servido para conocer cómo funcionan los sistemas de seguridad del coche, que han sido especialmente configurados para tener en cuenta también estos accidentes.
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Y hablamos de accidente, no de evitarlo. Aunque el Volvo XC90 cuente con lo último en tecnología de seguridad activa, como asistentes de mantenimiento de carril, o avisador de fatiga para el conductor, se ha trabajado en crear un protocolo de seguridad pasiva específico para cuando el accidente es inevitable.
El coche cuenta con un sistema que detecta un accidente de estas características, apoyado, sobre todo, en los controles electrónicos como el de estabilidad. Cuando lo detecta activa un sistema que trabaja por partes, para no adelantarse a los acontecimientos y fallar en el momento indicado.
Así, el Volvo XC90 primero tensa los cinturones para evitar que los pasajeros se muevan de su posición, y es que con un salto como el que vemos en el vídeo, cualquiera acaba fuera del asiento. También se encarga de mantener pegado al pasajero a la