He de reconocer que de entre los distintos preparadores que podemos encontrar en el mercado, los japoneses de Wald International son unos de mis favoritos. Son capaces de aportar un toque extra de personalización a sus diseños, pero sin la necesidad de sobrecargarlos en exceso. Una de las últimas preparaciones de esta empresa japonesa recae sobre un modelo italiano, el Maserati Ghibli que tantas alegrías está reportando a la marca del tridente.
Todas las mejoras aplicadas al Maserati Ghibli son estéticas y cabe la posibilidad de que sean montadas por separado, a gusto del cliente. Por un lado tenemos un kit de carrocería completo, que incluye los paragolpes delanteros y traseros y las taloneras. Por separado se pueden escoger las taloneras, el parachoques delantero de nuevo diseño con luz LED diurna complementaria de dudoso gusto y un llamativo paragolpes trasero con un difusor de tamaño considerable y cuatro salidas de escape ovaladas, que añaden una cuarta luz de freno a la zaga de este Ghibli.
Por otra parte se puede añadir un pequeño spoiler trasero en la tapa del maletero, este puede ser de fibra de vidrio o de carbono, si queremos que luzca sin ningún tipo de recubrimiento. No hay mejoras para el interior por parte de Wald International. Esta preparación será presentada al público en el Tokyo Auto Salon que abre sus puertas el 9 de enero.
Estos cambios estéticos son aplicables a cualquiera de los Maserati Ghibli. La berlina italiana se ofrece en Europa con tres motores. El más vendido es el diésel 3.0 V6 de 275 caballos de potencia, aunque comulgan más con el espíritu de la marca los dos V6 de gasolina biturbo de 3.0 litros. El menos potente entrega 330 caballos de potencia, frente a los 409 del más potente, que se gana el apellido S. El