¿Alguna vez habías soñado con un 911 GT3 con un envase más pequeño? Pues deja de soñar. Llega el Porsche Cayman GT4, un nuevo deportivo para los de Stuttgart que busca parecerse a su hermano mayor, adoptando incluso el motor del 911 colocado, eso sí, ahora en posición central.
La nueva criatura de Porsche se llama Cayman GT4, pero no hará falta leerlo para saber que nos encontramos frente a una versión especialmente deportiva. Estrena un nuevo paragolpes con un nuevo splitter frontal. En el lateral aparecen unas nuevas tomas de aire para refrigerar el nuevo propulsor, mientras que en la trasera se instala un difusor y un alerón fijo de grandes dimensiones.
El entrar en el habitáculo destacaremos un claro ambiente deportivo firmado, ante todo, por unos nuevos asientos tipo backet con el logotipo GT4 en los reposacabezas. No hay muchos más detalles diferenciadores aparte de una tapicería en Alcantara que cubra las partes bajas del salpicadero, el volante o el pomo del cambio. Otro de los detalles diferenciadores son las manetas de apertura de las puertas, sustituidas por unas simples y ligeras cintas.
Pero lo que realmente hace único al Porsche Cayman GT4 es su propulsor. Desecha el bloque del resto de versiones para hacerse con un motor 3.8 bóxer de 6 cilindros como el de un 911. Con ello consigue una potencia de 385 caballos, es decir, resulta 25 caballos más potente que el hasta ahora más deportivo Cayman GTS.
Asociado a una cambio manual de 6 relaciones, el Cayman GT4 acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos, empujando hasta alcanzar una velocidad máxima de 295 km/h. Llevado a la realidad, no es comparable, sino que es más rápido que un Porsche 911 Carrera o Carrera S.
Porsche, como es lógico, ha modificado el chasis para dotarlo de un comportamiento