Brabus acaba de lanzar su última propuesta que tiene de protagonista al Mercedes Clase C Estate. En este trabajo destacan tanto las modificaciones a nivel estético, como en lo que concierne a la mecánica. Además, las capacidades dinámicas de las versiones a las que va dirigido este paquete, han sido revisadas para conseguir mejores cualidades.
Si hablamos de imagen, el preparador instala nuevos accesorios en la carrocería del familiar para otorgarle una personalidad más deportiva. Entre otros, encontramos un spoiler delantero y faldones laterales además de un difusor trasero que descubre cuatro salidas de escape. Un último detalle que, sin duda, remata el conjunto de manera radical.
Brabus no se ha olvidado del interior, disponiendo de una oferta compuesta por inserciones especiales del preparador, alfombrillas exclusivas, o velocímetro personalizado. Un habitáculo de atmósfera más “nerviosa” que encuentra la guinda en la pedalera, fabricada en aluminio.
Por otro lado, las llantas conforma uno de los aspectos más importantes de la preparación, debido a la cantidad de opciones que podemos elegir. El cliente puede escoger dimensiones de entre 18, 19, y 20 pulgadas, pudiendo, del mismo modo, optar por varios diseños como el que vemos en las imágenes, el más deportivo en mi opinión. Este adorno decorará unos neumáticos de 225/35, en la parte delantera, y 255/30 en el tren trasero.
En cuanto al apartado mecánico, la firma se centra en tres variantes gasolina y otras dos diésel. En el primer grupo, encontramos al C180 Estate, que tras pasar por las manos de Brabus recibe un “extra” de 21 CV, elevando la cifra total de potencia hasta los 177 CV. A su lado, el C200 Estate se conforma con una potencia final de 225 caballos de potencia y, el último gasolina, el C250 Estate, lo hace con 34 CV más que de serie, 245 CV finalmente.
Si hablamos de los diésel,