Con el nuevo 911 GT3 RS, Porsche está rompiendo una vez más la barrera entre los coches deportivos y los de competición. Va equipado con el máximo grado posible de tecnología de competición que actualmente se puede incorporar en un 911 homologado para carretera y adecuado para la conducción diaria.
Las importantes modificaciones efectuadas en su sistema de propulsión, en la aerodinámica y en el diseño ligero mejoran las prestaciones respecto al 911 GT3. Con un tiempo por vuelta de siete minutos y veinte segundos, el nuevo 911 GT3 RS bate incluso el récord histórico del superdeportivo Carrera GT en el mítico trazo de Nürburgring Nordschleife, que estaba en siete minutos y veintinueve segundos. Con ello, el deportivo de altas prestaciones se sitúa de nuevo como referencia en su segmento.
Un motor de seis cilindros con 500 caballos
El 911 GT3 RS está propulsado por un motor de seis cilindros y cuatro litros, con 500 caballos de potencia y 480 Newton/metro de par máximos, y que va combinado con una transmisión PDK desarrollada específicamente. Este motor, que tiene la mayor cilindrada y la máxima potencia de los propulsores atmosféricos con inyección directa de combustible de la gama 911, consigue que el coche acelere de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos y de 0 a 200 km/h en 10,9.
Su consumo medio de combustible en el ciclo NEDC es de 12,7 l/100 km. Incorpora funciones especiales como la de desembragar a través de las «levas en neutro» (que es comparable a presionar el embrague en una caja de cambios manual convencional) y la del limitador de velocidad por medio del botón Pit Speed, adaptadas para el uso en competición.
Por primera vez, el techo es de magnesio; la fibra de carbono se usa para el motor y el capó del maletero; y otros componentes ligeros