Navegaba tranquilamente por las aguas del stand de Mercedes en el Salón de Barcelona. Ya me había enfrentado visualmente al impresionante Mercedes-AMG GT S y al poderoso Mercedes-AMG C 63, hasta que vislumbré a Moby Dick. Moby Dick es el sobrenombre que le he dado al nuevo Mercedes GLE Coupé. El BMW X6 de Mercedes tenía una zona reservada al fondo del stand de Mercedes, y sólo lo había visto en imágenes hasta entonces, con una pantalla por medio. Ahora estaba delante de mí. Este artículo recoge nuestras impresiones de la batalla con Moby Dick, un imponente Mercedes GLE 450 Coupé. ¿Es justificable el hype generado por este SUV?
El Mercedes GLE Coupé es muy grande
Una cintura muy alta, mucha chapa y un look aguerrido hacen que el Mercedes GLE Coupé resulte muy imponente en directo. Tanto o más que un BMW X6.
Aunque el Mercedes GLE Coupé mide 4,90 metros de largo – medidas inferiores a un Audi A6, por ejemplo – no hay que olvidar el hecho de que mide más de dos metros de ancho y más de 1,70 metros de alto. Es un coche que impone, es una mole compacta de diseño agresivo, y con muy poca superficie acristalada. Casi parece que un Clase E se fue al gimnasio y se convirtió en The Hulk al pasarse con los esteroides. Aunque es inevitable trazar un paralelismo con el BMW X6 – ambos compiten en el nicho de mercado y son rivales puros – el Mercedes GLE Coupé hace gala de los últimos códigos de estilo de Mercedes, como su enorme calandra o sus características ópticas LED.
Quiero decir que el GLE Coupé tiene personalidad propia, aunque en nuestro subsconsciente esté tan marcado a fuego la comparación con el BMW X6, que no podamos ver esa personalidad. Otro detalle que