El nuevo Toyota Hilux acaba de mostrarse al mundo en Tailandia. El Chuck Norris de las cuatro ruedas, el vehículo más duro del mundo, nos saluda en su nueva generación. Más alto, más grande, más fuerte y más potente, pero reteniendo el mismo espíritu práctico que tantos éxitos le ha granjeado. Si hay un vehículo auténticamente global, es el Toyota Hilux: te lo puedes encontrar en granjas australianas, en una aldea birmana, en la Tierra del Fuego chilena o luchando en Siria con armas antiaéreas montadas en su caja. Sí, es tremendamente ubicuo. Y es por ello que es un coche tan importante. Vamos a conocer de nuevo, a esta aguerrida navaja multiusos automovilística.
Más robusta y con un nuevo diésel de 2,8 litros y 177 CV
La Toyota Hilux 2016 trata de ser más robusta, pero menos ruda.
El Toyota Hilux ha vendido 16 millones de unidades en 180 países, desde finales de los años 60. El actual Hilux se fabrica en Tailandia, y en su desarrollo se han tenido en cuenta los inputs de miles de usuarios actuales de esta pick-up. Como conclusiones fundamentales, los usuarios demandan que la pick-up sea aún más robusta, pero también demandan una mayor comodidad y facilidad de uso. Por ello, se ha rediseñado el chasis de largueros y recalibrado la suspensión – que sigue siendo de ballestas en el eje trasero – para lograr este doble objetivo. El aislamiento de habitáculo y mecánica mejora en todas sus versiones para un mayor confort de los ocupantes.
Una de las principales novedades es que el Toyota Hilux se ofrecerá con tres tarados de suspensiones: estándar, confort – más enfocada a la comodidad y conducción fundamentalmente en carretera – y Heavy Duty, enfocada al uso todoterreno y altas cargas. A nivel mecánico, los Hilux estrenan novedades de calado.