Yasuhisa Arai (jefe de Honda) y Fernando Alonso
Tras el GP de España los resultados no llegaron para McLaren, a pesar de que McLaren introdujo mejoras y nueva decoración para marcar el fin de una era y el comienzo de otra.. Los tremendos problemas de “driveability” del MP4-30 de Button y los problemas de frenos que terminaron con la carrera de Alonso, han hecho que los primeros puntos que deberían haber llegado en Barcelona no lo hiciesen.
Pese a todo, Fernando Alonso sigue optimista y feliz. Él cree que los puntos llegarán en unas semanas y que muy posiblemente este año puedan hacer podios e incluso ganar carreras al final de temporada. Es consciente de que el coche tiene mucho potencial y solo falta poder exprimirlo al máximo y poner todo ese batallón de piezas que tienen en fabrica.
Tras la carrera de Montmeló, las alarmas han saltado y la prensa ha sido muy negativa en cuanto al futuro de McLaren. Muchas personalidades del paddock también han expresado su desconfianza en el proyecto de McLaren-Honda y aseguran que nadie ha conseguido recuperar tanto margen en tan poco tiempo.
El propio Jenson Button, terminó tan harto de la difícil conducción del coche (sobre todo por un terrible sobreviraje) en Barcelona, que aseguró ante las cámaras que este año dudaba que puntuasen. Un pesimismo exagerado que probablemente lo dijo por el enfado del momento, ya que el coche de Alonso, de no haberse retirado probablemente podría haber conseguido 1 o 2 puntos.
Y a colación de la retirada de Alonso, McLaren ya ha investigado la causa de los problemas del freno trasero y han determinado el motivo. El causante de la retirada es ajeno a la falta de fiabilidad del MP4-30 y se debe a un “tiar off” (una tira de plástico de las que protegen la visera del casco y que