La marca alemana de la estrella celebra todo un hito en su historia, y no es para menos, ya que el Mercedes-Benz Clase C ha superado la cifra de 8 millones de unidades vendidas. Además, en esta ocasión el motivo de celebración es doble, ya que una de las 4 factorías dónde se fabrica el actual Clase C, la planta de East London (Sudáfrica) festeja que acaba de sobrepasar el millón de turismos fabricados en sus instalaciones.
Aunque no lo parezca, la historia del Mercedes-Benz Clase C comenzó en 1982 con la llegada al mercado del Mercedes E, conocido popularmente como “baby benz”, siendo en ese momento era el más pequeño de los vehículos ofrecidos por la estrella. No sería hasta la primavera de 1993 cuando veríamos por primera vez un vehículo con la denominación Clase C; la primera generación del C como tal supuso un gran avance para la marca en muchos sentidos, no sólo estrenó las versiones familiares, que no existían con el E, sino que además sirvió de base para el primer modelo AMG de producción bajo licencia de Mercedes-Benz.
Si el C 63 AMG Coupé ya era espectacular, el Black Series rozaba el séptimo cielo.
Estos hechos ponían el listón muy alto y difícil de alcanzar para la segunda generación del Clase C, que llegó al mercado en el año 2000. Sin embargo la introducción de un pequeño coupé, denominado SportCoupé, y un diseño sobrio y de calidad en las variantes berlina y familiar hicieron que está segunda generación estuviera a la altura de las circunstancias hasta el año 2007, cuando fue sustituida.
La tercera generación del Clase C se desmarcaba un poco respecto a las anteriores ya que estrenaba un frontal que cambiaba notablemente según la línea de equipamiento que eligiéramos, permitiendo así una mayor personalización del vehículo. En esta generación, además