Titular amarillista me dirás. ¿Qué es eso de que MINI da un paso atrás? ¿Cómo puedes decir eso si su gama es cada vez más amplia? Pues sí, MINI acaba de anunciar que va a dar un nuevo rumbo a su filosofía, y el nuevo rumbo nada tiene que ver con aspiraciones de grandeza, sino con volver a sus orígenes, al sentimiento MINI. Su nuevo logotipo confirma este cambio.
Esta semana la marca ha presentado su MINI Clubman, un modelo de nueva generación que se erige como el más polivalente de la gama. Pero junto con él, junto con una versión que siempre ha estado presente en MINI, llega un nuevo logotipo más sencillo, más minimalista, más humilde, más MINI. Sus nuevos modelos irán por esta misma senda.
Nos muestra el fabricante un logotipo que se forma en dos colores, el blanco y el negro, letras sencillas, en dos dimensiones, un escudo sin pretensiones para los no entendidos en tipografía, sin demasiado adorno y volviendo a los orígenes de la marca, al MINI original con sello de Sir Alec Issigonis. Desde la marca dicen que es su mayor cambio de imagen desde 2001, desde su renacer con BMW a las espaldas, y hay que tomar esto como un regreso a los orígenes de la marca a lo largo de sus próximos lanzamientos.
Según MINI toda su gama se basará en 5 modelos, todos ellos diferenciados y cada uno con su valor propio. De esa gama ya conocemos dos de ellos, el MINI Hatch, que ahora llega con 3 y 5 puertas, y el nuevo MINI Clubman, recién presentado. Quedan otros tres por descubrir, entre los que se encuentra el nuevo MINI Cabrio que llegará en los próximos meses.
Pendiente de renovación está también el MINI Countryman, que llegará en unos 2 o 3 años.