¡Confirmado! Elon Musk ha de ser necesariamente el mayor troll de la industria del automóvil. No contento con haber puesto a su marca, su proyecto Tesla Motors, en boca de todos, quería más. No contento con haber hecho que Youtube colapse con vídeos de su Tesla Model S ajusticiando a superdeportivos de muy diversa índole, desde muscle cars hasta purasangres italianos, Ferrari, Lamborghini, etcétera, quería más velocidad. Y el Tesla Model S – en su variante más radical y potente, la P85D de 700 CV – ya es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3.0 segundos – que no se te caiga el monóculo, que es el mismo tiempo que tarda en hacerlo un Ferrari 488 GTB – y hacer el cuarto de milla en 10.9 segundos.
A Tesla Motors no se le ha ocurrido mejor nombre para una mejora que hace que la aceleración del Tesla Model S sea la misma que la ofrecida por un Ferrari 488 GTB: Modo Ridículo.
Y a la gente de Tesla Motors no se le podía haber ocurrido un nombre más apropiado que ese, Ludicrous Mode, que traducido al castellano viene a significar ridículo, absurdo. Porque hilar tan fino para mejorar aún más los tiempos del Tesla Model S es cuanto menos ridículo. La preparación costará 10.000 dólares, unos 9.215€ según el cambio actual, que no ha de ser más que una vaga referencia, puesto que aún no conocemos su precio oficial para Europa.
Ridículo y absurdo tanto esfuerzo, y ese precio, para convertir a un Tesla Model S en lo que definitivamente no es, en un ajusticiador de superdeportivos, en una máquina casi de drag race. Y esa es la razón por la que Elon Musk es un gran troll, porque teniendo en sus manos la posibilidad de reírse un poco más