Tras el conocido escándalo de Volkswagen sobre sus motores diésel trucados, comienzan a llegar las primeras consecuencias. Respecto a lo que afecta a nuestro mercado, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha anunciado que, el Gobierno, va a reclamar al Grupo Volkswagen todas las ayudas proporcionadas gracias al Plan Pive, que suponen 1000 € -hasta el PIVE 7- y 750 € del PIVE 8 por cada coche comercializado. Como bien sabrás, esta es a cantidad que el Ministerio de Industria abonaba a cada cliente que adquiría un vehículo de bajas emisiones. De este modo, el consumidor no se vería afectado en ningún caso, ya que, en su momento, adquirió este tipo de vehículos de buena fe sin saber que incumplía con la normativa de emisiones.
Según las últimas informaciones a las que hemos podido acceder, la filial de la compañía alemana niega que haya aceptado devolver las ayudas PIVE, por lo que ya podemos asegurar que la polémica está servida.
A todo esto, hay que sumar que, además de reclamar todas las ayudas del PIVE, el Gobierno también está estudiando la posibilidad de demandar al consorcio alemán por daños y perjuicios.
Los modelos afectados ya no están a la venta
Asimismo, el titular de Industria señaló que, todos los modelos del Grupo Volkswagen (Audi, Seat, Skoda y Volkswagen) equipados con la familia de motores diesel EA189 con la etiqueta Euro 5, dejarán de comercializarse. En total se habrían paralizado unos 3.320 vehículos. El resto de modelos disponibles en el concesionario están homologados correctamente y, además, cumplen con la normativa anticontaminante Euro 6. Por tanto, todos los modelos del Grupo Volkswagen que configures en la web de cada marca, están libres de trucos.
Dentro de los más que posibles efectos colaterales, está implicada toda la red de concesionarios del grupo, que se