La bomba que cayó sobre Volkswagen hace unas semanas está viendo ya las primeras consecuencias graves. Mientras que los primeros caídos eran los directivos del conglomerado alemán, llegando ahora Matthias Müller a la dirección, ahora son las inversiones las que peligran. Precisamente Müller, en unas recientes declaraciones, asegura que se cancelarán las inversiones previstas que no sean vitales.
El escándalo de las emisiones de los motores TDI ha ido un paso más allá y ahora se carga parte del futuro del grupo. Estaba claro que las primeras cifras en lo que a gastos y multas se refiere no era halagüeñas con la cartera de Volkswagen AG, pero lo cierto es que la bola que se ha formado parece más grande de lo previsto y ahora empieza a haber miedo por unas inversiones que también afectan a nuestro país.
Matthias Müller
España cuenta con dos fábricas del grupo como son la de SEAT en Martorell y la de Volkswagen en Landaben. Cierto es que no se esperan cambios a corto plazo para estas dos fábricas, pero sí podrían verse afectadas, sobre todo la de SEAT, en lo que a comenzar a producir nuevos modelos se refiere.
La inversión en I+D para múltiples marcas seguramente se vea recortada, y algunos de los proyectos no verán la luz verde. En el caso de SEAT, hasta cuatro nuevos modelos iban a presentarse en los próximos dos años. En otras palabras, de esos cuatro modelos puede que queden menos de dos. O lo que es lo mismo, que queden los que más rentabilidad aporten al grupo.
Müller se refería a un grupo de empleados advirtiendo de la complicación de la situación y de las duras medidas que tendrá que tomar la nueva dirección del grupo. Aunque el CEO de Volkswagen anunciaba que mantener los puestos de trabajo actuales sería una