La subasta Driven by Disruption del próximo 10 de diciembre en Nueva York promete marcar récords históricos. Además del Ferrari 290 MM de Fangio – que podría ser el Ferrari más caro jamás vendido – o el Porsche 356 de Janis Joplin, RM Sotheby’s pondrá a subasta el último Ford RS200 fabricado. No se trata de un coche de competición, es su versión de calle, con mínimas adaptaciones sobre el coche de carreras. Una máquina fabricada con el simple propósito de homologar uno de los coches más rápidos y peligrosos del desquiciado Grupo B.
Ford fue obligada a fabricar 200 unidades de calle del Ford RS200 para poder homologar su homónimo de competición.
Este Ford RS200 es el último de sólo 200 unidades de calle fabricadas. Data del año 1986 y su número de chasis es el 169. Curiosamente, a pesar de haber sido fabricado en Reino Unido en 1986, permaneció oculto en la factoría de Boneham hasta el año 1994, cuando fue adquirido por un coleccionista de Michigan y enviado a Estados Unidos. Desde entonces el Ford RS200 sólo ha cambiado una vez más de manos, y el único accesorio no original que equipa el coche son unas nuevas alfombrillas. Eso es todo.
Este Ford RS200 es una reina de garaje. Desde su fabricación sólo ha recorrido 1.960 kilómetros, y es un coche con 29 años de edad. La media anual de kilometraje es de 67,5 kilómetros. A pesar de ello, ha sido pulcramente mantenido y está en perfecto orden de funcionamiento. Por desgracia, su valor está intrínsecamente ligado a su kilometraje, por lo que dudo que este coche vaya a recorrer muchos kilómetros más próximamente, mal que nos pese. Y este coche es un simple instrumento de inversión, no lo dudéis.
A nivel de tren de rodaje, mantiene intacto su motor 1.8