Amazon quiere transformar por completo la logística de su hipermercado online. ¿Y cómo quiere conseguirlo? Con drones, vehículos voladores no tripulados que te entregarán tus pedidos en menos de media hora. Mientras tanto, Jeremy Clarkson y su equipo calientan motores, trabajan ya en el rodaje del nuevo programa de televisión, de cuyo nombre aún no podemos hacernos eco, que se estrenará en la temporada 2016. ¿Por qué resulta tan interesante que Amazon comience a repartir pedidos en drones?
El nuevo programa de Jeremy Clarkson, James May, y Richard Hammond, cuyo nombre aún desconocemos, se estrenará en 2016.
Primero por su rapidez. 30 minutos es un tiempo inimaginable para cualquier servicio de reparto de pedidos mínimamente viable que hayamos conocido hasta la fecha. Amazon, que en algunos lugares ya es capaz de entregar pedidos en unas horas, quiere que los drones ayuden a aumentar la rapidez de las entregas hasta límites que hasta hace muy poco nos hubieran parecido inimaginables.
Por otro lado, Amazon aboga por lo eficiente y seguro que resulta repartir paquetes con drones. Los drones son ligeros, consumen muy poca energía (y no emiten CO2, como un cambio de reparto con motor de combustión), no colapsan las carreteras, no aparcan en doble fila en tu calle para entregar el paquete, no se retrasan, y son capaces de dejar el pedido exactamente donde lo solicite el cliente. En el vídeo se aprecia cómo bastaría con dejar una marca con el emblema de Amazon, a modo de helipuerto, en el jardín para que el dron deposite el paquete.
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Conscientes de que Jeremy Clarkson es un buen reclamo publicitario, en Amazon ya están amortizando su imagen, no solo para promocionar el futuro Amazon Prime Air, sino también Amazon Fire TV, su reproductor de vídeo on demand.
En cualquier caso, y aunque