Este año celebramos un acontecimiento sumamente importante para SEAT. Hace veinte años nacía el primer SEAT Ibiza Cupra, y con él un concepto que perduraría hasta nuestros días, el de la gama CUPRA de SEAT. Allá por 1996, y tras haber conquistado el título mundial de rallyes en la categoría de 2 litros con el Ibiza Kit Car, SEAT se propuso lanzar un modelo con cuerpo de turismo, y prestaciones de deportivo de carreras. Así sería como nacería la idea del CUPRA, una denominación que combina las palabras Copa (Cup) y Competición (Racing). Y así es como nacería el primer SEAT Ibiza con la coletilla CUPRA en su nombre.
Desde 1996, SEAT ha desarrollado modelos CUPRA para las gamas Ibiza, Córdoba y León, como turismos venidos a más, con prestaciones de deportivo.
Aunque el catalizador del primer SEAT Ibiza CUPRA fuera, sin lugar a dudas, el de los éxitos en competición del Ibiza Kit Car, SEAT Sport ya estuvo trabajando durante meses en el desarrollo paralelo de un deportivo de calle inspirado en aquel Kit Car. Así es como nacería el primer SEAT que llevaría las letras CUPRA en su carrocería, un SEAT Ibiza Cupra con motor de 2.0 litros y 150 CV de potencia. Un deportivo de bolsillo que alcanzaba los 216 km/h y practicaba un 0 a 100 km/h en 8,3 segundos.
Pensemos que por aquel entonces el SEAT Ibiza CUPRA se situaba en unas prestaciones muy parecidas a las de su hermano mayor alemán, el Volkswagen Golf GTI.
En estos 20 años hemos visto modelos CUPRA para todos los gustos, y para todos los bolsillos. En el año 2000 la gama crecería con un SEAT Córdoba CUPRA que pretendía ofrecer una versión de calle del SEAT Córdoba WRC, dotado del motor 1.8 20 VT de 156 CV que también estrenaría ese