No podemos quejarnos en cuanto a novedades en la edición de este año del Salón de Ginebra, de ninguna de las maneras. Lamborghini Centenario, Bugatti Chiron, Audi Q2, Porsche 911 R… la lista es interminable. La que os traigo en este post quizás no sea una novedad trascendental, pero si un ejercicio de diseño que merece la pena contemplar. Estoy hablando del Italdesign GTZero, un prototipo que presenta la firma italiana que guarda en su carrocería mucha pero que mucha belleza. Además debajo de su piel esculpida al detalle guarda una tecnología eléctrica digna de mención.
El concepto que presenta Italdesign se basa en una estética Shooting Brake. La razón de este tipo de carrocería es simple, la búsqueda de la deportividad sin renunciar al espacio interior. De esta manera nos encontramos con un diseño en donde la línea cae muy suavemente en la zaga y permite que los dos ocupantes de las plazas traseras puedan viajar cómodamente. La estética mezcla dibujos del pasado con la modernidad del presente, haciendo mención en cada esquina a antiguos diseños de la casa. Un pastel que tiene por guinda unas llantas de 22 pulgadas en el tren delantero y de 23 en el trasero.
El interior también ha sido creado con mesura y tesón para conjugar un espacio minimalista y capaz de despertar sensaciones. No hay botones a excepción del que acciona el freno de mano, todo se controla mediante una pantalla tipo OLED, una tecnología que se presenta como lo último en sistema de infoentretenimiento. Toda la información relevante le llega al conductor por medio de otra pantalla digital, superficie desde donde podemos acceder a la velocidad, rpm, navegación y demás datos del viaje. El interior, con una configuración de 2+2, destaca por el cuidado de la tapicería y los detalles en aluminio satinado y carbono.
El ejercicio