Pelle Söderström es un ingeniero mecánico sueco. Aficionado a la mecánica y la fabricación desde que era joven, se ha recientemente embarcado en un interesante proyecto artesanal. Lo ha bautizado como Sweet 16, y consiste en la construcción artesanal de un motor de 16 cilindros… ¡en línea! Un motor atípico, con una configuración nunca aplicada a un coche de producción por motivos obvios, como la longitud realmente poco práctica del motor. Pero a Pelle Söderström no le importa la practicidad. Vamos a conocer su creación.
Todo el proceso de construcción ha sido documentado en su página web, a la que podéis acceder desde aquí.
Todo comenzó con un sueño de juventud, con un tal Hércules Jonsson televisivo. Un joven chico que arreglaba coches antiguos de los años 30, llevando a cabo todo tipo de locuras sobre ellos. Pelle Söderström quería ser como el pequeño Hércules, así que aunque entrado en años, comenzó a cumplir el sueño de su infancia. El punto de partida fueron nada menos que cuatro motores Volvo B20 de los años 70. Este bloque es una robusta evolución del Volvo B18, el mismo que mueve al coche con más kilómetros del planeta.
Los bloques fueron reconstruidos, y unidos en un largo proceso de meses. Según su creador, no son cuatro motores juntos. Es un motor nuevo construido a partir de cuatro bloques B20. Su culata, árbol de levas y su cigüeñal son completamente artesanales. Cada pieza ha sido meticulosamente diseñada por ordenador, con piezas como los nuevos pistones encargados a especialistas de la talla de Mahle. El resultado es un motor atmosférico de 16 cilindros en línea, 8,1 litros de cilindrada y una potencia que debería rondar los 500 CV.
Uno de los mayores problemas fue solucionar la vibración del larguísimo cigüeñal. Lo hizo mediante un sistema de cadenas que