Renault está mejorando, aun le quedan más de 20 tokens por usar y el salto de calidad ha sido importante con los últimos usados, se habla de unos 40CV de mejora o algo más, lo que supone unas 4 décimas de mejora por vuelta, algo que podría alzar a Red Bull a pelear con Mercedes si cometen errores o tienen problemas en circuitos urbanos, pero sobre todo a terminar el mundial por delante de Ferrari, algo que sería una ruina para las aspiraciones de los italianos.
Tras la amenaza de marcharse de Red Bull y su crisis de motores, finalmente decidieron usar motores Ferrari con especificación 2015 para Toro Rosso y seguir con los Renault, ya que nadie quería darles motores por considerarlo un rival peligroso, para Red Bull. Pero las tiranteces de ambos grupos hicieron que el patrocinio de Renault y la implicación cambiase, borrando el nombre de Renault de Red Bull para rebautizar los motores como TAG Heurer.
Pero los progresos de Renault tras la mala temporada pasada, han hecho que Red Bull y Renault se terminen reconciliando y vuelvan con más fuerza. Ahora no solo Red Bull extiende su contrato para 2017 y 2018, sino que también Toro Rosso volverá a montar motor Renault tras una temporada con Ferrari (que perdería un cliente). El equipo B de Red Bull quiere motores de la misma especificación y por eso el movimiento ideal es tomar motores galos, ya que los de Maranello no querían darles motores con especificaciones actualizadas por si se transforman en un oponente…
Pero esto no solo beneficia a Red Bull y Toro Rosso, teniendo motores competitivos y estabilidad tras dicha crisis, sino que también es bueno para Renault, que consigue más coches para obtener más datos y desarrollar su motor en la temporada próxima sin tokens y por