El británico Anthony Jannarelly es uno de los diseñadores más activos en el mundo automotriz en los últimos años. En Diariomotor lo conocimos hace ya ocho años, cuando presentó su particular visión de un hipotético coche de Apple, al que bautizó como Apple iMo. Por aquel entonces aún era estudiante en la universidad, pero desde entonces su visibilidad ha aumentado exponencialmente hasta el punto de haber diseñado un superdeportivo que ya se encuentra en producción.
Hablamos del Lykan Hypersports, una bestia de 770 CV concebida en Dubai por W Motors. No obstante, Jannarelly parece no haberse conformado con haber sido capaz de diseñar un superdeportivo que haya llegado a producción (normalmente estos proyectos se quedan en el limbo por los siglos de los siglos), y su ambición es tal que ha llegado al punto de haber creado su propia marca de coches. Se denomina Jannarelly y ya ha presentado su primer modelo, el Jannarelly Design-1.
Para el debut de su propia marca, Jannarelly ha optado por crear un roadster de marcado corte retro, con claras reminiscencias a la época dorada de este tipo de carrocerías. De hecho, se nota la influencia del diseño británico de roadster de los años 60, si bien el Design-1 tiene unos rasgos más agresivos y un corte más racing. Mide 3.86 metros de largo y apenas pesa 710 kg, por lo que se trata de todo un peso pluma dispuesto a ofrecer diversión al más puro estilo roadster.
Sin embargo, su arquitectura difiera de la de un descapotable biplaza clásico, ya que su propulsor va situado en posición central. El motor es un 3.5 V6 de 304 Nm, un tamaño considerable para un coche de este tipo, y transmite su fuerza a las ruedas traseras a través de una caja de cambios manual de seis velocidades. También