Las 24 Horas de Le Mans 2016 serán recordadas por lo que pudo ser y no fue. Toyota tenía su primera victoria al alcance de la mano. Con Kazuki Nakajima al volante, la marca japonesa se disponía a hacer historia. Estaban a punto de lograr su primera victoria en una de las competiciones más importantes del mundo del motor, pero algo falló.
La primera señal de que algo no marchaba bien la daba el piloto. Nakajima avisaba por radio al equipo de que tenían algún tipo de problema. El coche estaba perdiendo potencia y cada vez le costaba más avanzar. Las caras dentro del equipo eran presagio de lo que terminaría por suceder. El Toyota número #5 se quedaba parado en la recta de meta y el Porsche #2 pasaba a su lado como un tiro camino a la segunda victoria consecutiva para la marca de Stuttgart y decimoctava de la historia. ¿Pero qué pudo pasar en ese Toyota TS050 HYBRID?
Esa es una de las preguntas más recurrentes en el día de hoy. La mayoría esperábamos que la marca diese cuenta de lo sucedido en el comunicado de prensa posterior a la carrera pero optaron por dar carpetazo a lo sucedido alegando que lo estudiarán para que no vuelva a suceder la próxima temporada, en la que ya podemos dar por hecho que volverán a luchar por esa victoria que se les resiste.
El desenlace más dramático de la historia de @24hoursoflemans. El Toyota del líder se paró a 4 minutos del final https://t.co/S2ayoSOwDR— Eurosport.es (@Eurosport_ES) 19 de junio de 2016
Desde la web británica DailysSportCar.com afirman, no obstante, haber escuchado a un miembro del equipo Toyota Gazoo Racing hablar de un fallo en el turbo del TS050 HYBRID. Algo que resulta factible, si tenemos en cuenta el modo en