En Estados Unidos los swaps de motor están al orden del día en el mundo del tuning. Es muy común transplantar motores V8 a coches que jamás fueron ideados para ello, como los Mazda MX-5 o los Honda S2000, sin ir más lejos. Con la llegada de los motores 6.2 V8 Hellcat de 707 CV el mundo de los swaps ha recibido sangre nueva, y todos quieren construir coches con uno de los V8 más bestiales del planeta. Un concesionario del Grupo FCA ha construido una RAM 1500 con motor Hellcat de 707 CV. Se llama… Ramcat.
Lo más complicado ha sido hacer que la electrónica del coche se comunique con el propulsor.
De acuerdo, el nombre es previsible pero su historia es interesante. Nació como una simple RAM 1500 con motor HEMI V8. El concesionario Midland Chrysler de Canadá, logró hacerse con un motor Hellcat, comprándolo a un concesionario californiano por 45.000 dólares. Fue uno de los pocos cientos de motores Hellcat que FCA vendió de forma independiente a los coches – se conocen como “crate engine” en el argot – hasta que prohibió esta forma de venta al no dar abasto a la demanda de estos vehículos de altas prestaciones.
El objetivo del proyecto es vender una RAM 1500 con preparación Hellcat a un cliente final. El concesionario canadiense pide la friolera de 90.000 dólares por la conversión, sin tener en cuenta el vehículo de base. Teniendo en cuenta los cientos de horas que se han invertido en el proyecto – aún sin completar – lo puedo entender. La instalación física del motor bajo el capó ha sido problemática: han tenido que elevar la altura del coche en 7,5 cm para que el motor – muy alto – entrase adecuadamente.
Instalar el monstruoso V8 HEMI Hellcat de 707 CV en