Hace unos meses nos hacíamos una pregunta, que por desgracia ha acabado siendo una trágica predicción. ¿Qué sucedería si un Tesla Model S sufría un accidente grave, o incluso mortal, mientras un cliente utilizaba la función Autopilot? Stephen Boulter, Project Manager del Jaguar XF, declaraba en una entrevista a Mashable que entre sus mayores temores se encontraba esa posibilidad. Un accidente que, por su repercusión, podría asestar un golpe importante a los avances que se requieren para la introducción del coche autónomo. Y por desgracia ese momento ha llegado. Joshua Brown, dueño de un Tesla Model S, fallecía al colisionar contra el remolque de un camión en una carretera de Florida mientras su coche circulaba semi-autónomamente utilizando la función Autopilot. No parece que ni Joshua, ni Autopilot de Tesla, tuvieran la culpa. Pero ahora son muchas las preguntas que nos hacemos acerca del coche autónomo y su desarrollo.
Hablemos de Autopilot y de cómo Tesla puede destruir la ambición de comercializar coches autónomos
Nota: la imagen que ilustra esta entrada, y que muestra un Tesla Model S accidentado, no refleja el accidente del que hablamos en este artículo, sino otro que sufrieron unas jóvenes en Alemania hace unas semanas.
Tesla Motors reconoció el accidente en una entrada en su propio blog, bajo el titular “una trágica pérdida”. También reconocía que la NHTSA – el departamento que vela por la seguridad de las carreteras estadounidenses – ha abierto una investigación para analizar el funcionamiento de Autopilot y determinar si el sistema trabajó apropiadamente en el momento del accidente. Fue la propia marca la que informó del suceso a la NHTSA, y la que ya está proporcionando todos los datos del suceso para concluir qué sucedió.
Recordemos que por su tecnología, el Tesla Model S registra gran cantidad de datos que muy probablemente permitirán a los