El Toyota Supra es uno de esos automóviles japoneses míticos donde los haya. Su última generación – conocida por su código interno A80 – fue lanzada en 1993, aunque algunas unidades ya fueron fabricadas en 1992. Del Toyota Supra ya os hemos hablado en nuestro especial sobre los mejores deportivos japoneses de los años 90, por lo que ahí os remitimos para más datos e información técnica. Hoy hacemos un viaje en el tiempo, a una batalla en circuito en la que Best Motoring enfrentó al entonces nuevo Supra contra lo mejor de Japón.
Los años 90 fueron una década dorada para el automóvil japonés de altas prestaciones. Simplemente una década perfecta.
Sin duda el motor más impresionante del Toyota Supra fue el potente 2JZ-GTE, un seis cilindros en línea sobrealimentado por dos turbocompresores. Un bloque duro como una roca – que también se ofrecía en versión atmosférica con 220 CV – cuya potencia máxima era de 280 CV. Muchos coincidían en que la potencia que pasaba al tren trasero a través de su cambio manual superaba con holgura la cifra de los 300 CV. Con un peso de menos de 1.500 kilos y una puesta a punto deliciosa, el Supra fue una de las sensaciones de la década.
Pero la verdadera prueba era la batalla de Best Motoring en el circuito de Tsukuba, en el que se tendría que enfrentar a no pocos “cocos” de la industria japonesa del automóvil. No sólo el Supra con motor de 280 CV estaba incluido en la comparativa, también lo estaba el Supra atmosférico – conocido como Supra SZ – que tenía a su mayor rival en casa: un Toyota MR2 SW20 con 221 CV de potencia y motor central trasero. El hermano mayor del Supra SZ tenía una competencia mucho más dura en