Es británico, mecánico de camiones, piloto de Road Race en moto, habitual del TT de la Isla de Man y presentador de televisión (incluso se barajó su nombre para presentar Top Gear) entre otras cosas. Pero sobre todas ellas, el único denominador común es que Guy Martin es un adicto incansable a la adrenalina.
Su última locura va a ser disputar la carrera de carretera abierta más rápida del planeta, la Nevada Open Road Challenge, y como no puede hacer las cosas de una manera normal ha decidido que va a disputar la prueba con un vehículo un tanto atípico en estas competiciones: una Ford Transit apretada hasta las cejas. ¿El objetivo? Alcanzar los 320 km/h y mantener una media de 174 mph (280 km/h)
Guy Martin y su dependencia por la adrenalina
La gesta forma parte de la nueva temporada de su programa Speed que presenta en Channel 4 donde tiene el único objetivo de batir cualquier récord que se le ponga por delante. Hemos visto enfrentarse con éxito al muro de la muerte, correr en pruebas extremas de mountain bike, corriendo en rallycross con un coche de 600 CV, rodando en Nürburgring para preparar el récord a la moto más rápida en el Infierno Verde y dentro de poco va a tratar de ser el hombre más rápido del mundo sobre dos ruedas sobre un cohete Triumph de 1.000 CV.
Con este currículum a sus espaldas, decidió que tras sufrir un accidente considerable con su Ford Transit de tres años no iba a arreglarla para volver a circular con ella, la iba a preparar para correr. Una cosa lleva a la otra y al final te plantas enfrentándote a la Nevada Open Road Challenge con un vehículo industrial que ya quisieran los mensajeros.
Preparada a fondo por M-Sport, la Transit de Martin dispone