El Salón de París 2016 ha empezado fuerte para Audi, que nos presentaba el Q5 2017 y el RS3 Sedán. La sorpresa era mayor cuando justo después aparecía el Audi RS3 LMS, una versión de competición que toma como base precisamente al recién presentado Sedán. Mientras el escalón más alto está ocupado por el Audi R8 LMS que corre en WEC y DTM, este nuevo modelo se encargará de competir en el TCR contra rivales como el SEAT León, Opel Astra o Volkswagen Golf.
Si el aspecto del Audi RS3 Sedán ya nos parecía espectacular, este modelo para circuito será mucho más extremo. Recibe un kit de carrocería más ancho (hasta los 1,95 metros que permite la competición) y los colores negro y rojo que le dan un aspecto siniestro. En el frontal destacará su prominente splitter delantero, mientras que en la zaga sobresalen el enorme alerón trasero fijo y la salida de escape central.
Bajo el capó del Audi RS3 LMS encontraremos un motor 2.0 turbo de cuatro cilindros, que es obligatorio para todos los participantes en el TCR. De esta manera dejará a un lado el 2.5 TFSI de cinco cilindros y 400 CV que monta el de serie. El de competición tendrá una potencia de 330 CV, pero gracias a su reducido peso de 1.285 kg, consigue buenas prestaciones. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y tiene una punta de 240 km/h, siendo algo más lento que el RS3 Sedán.
Se beneficiará de equipamiento de seguridad que incluye la jaula antivuelco o asiento de competición. Durante la temporada 2017 podremos ver al Audi RS3 LMS hasta en 10 carreras de TCR, aunque se espera que ese número vaya aumentando. Las entregas de este carreras-cliente comenzarán a finales de este año y tendrá un precio de 129.000 euros