El Ford Focus RS es uno de los compactos de altas prestaciones más interesantes del momento. Cuenta con un motor 2.3 Ecoboost de 350 caballos, que se reparten entre las cuatro ruedas dependiendo de las condiciones de marcha y del modo de conducción seleccionado. Por su potencia y el sistema de tracción integral, se encuentra en un punto intermedio donde no tiene claros rivales, salvo el A45 AMG de Mercedes, lo que le beneficia aún más.
Sin embargo, siempre hay clientes que buscan algo más y que se pueden cansar o adaptar rápidamente a las prestaciones de un modelo de serie. 350 caballos para un compacto no son precisamente pocos, pero siempre hay quien quiere un poco más. Para esas personas, el preparador americano Hennessey ha presentado una preparación específica que aumenta el rendimiento del potente 2.3 Ecoboost del Focus RS.
Hennessey es conocido por realizar preparaciones de auténtico infarto en modelos de muy alta gama. En este caso, ha tomado el compacto deportivo y lo ha dotado de una mayor potencia, aunque igual nos podríamos haber esperado algo más espectacular. El aumento de potencia ha sido de 55 caballos que no está nada mal, pero, si os parece poco, os diré que el par motor máximo ha pasado de 470 Nm (que ya es un par muy elevado) a nada menos que 576 Nm, una cifra muy a tener en cuenta.
Para llegar a alcanzar tales cifras, Hennesey ha sustituido el filtro de aire por otro de mayor flujo, un sistema de escape específico y una profunda modificación de la centralita electrónica del motor. El preparador cobra casi 5.000 dólares americanos por esta preparación, pero tendrás que enviar tu coche al Estados Unidos para que te lo actualicen.
En cualquier caso, el preparador tiene margen de mejora para realizar una potenciación extrema, aunque