Del Brexit por ahora sabemos que se ha aceptado por votación en referendum y que puede traer serios problemas a Reino Unido en cuanto a tratados de comercio y otros problemas monetarios. Es un país muy importante para el sector del automóvil europeo y por tanto estratégico a la hora de que Europa sea una potencia mundial que pueda luchar contra Estados Unidos y China.
En el país del té a las cinco hay marcas icónicas y muy importantes con fábricas funcionando a pleno rendimiento. El otro día os hablábamos de cómo la japonesa Nissan estaría planteándose trasladar la producción de la próxima generación del Qashqai a otra fábrica europea. Las razones que habría argumentado la dirección de la firma es que tras el Brexit su fábrica podría perder competitividad y por consiguiente estar en desventaja respecto a sus competidores.
Tras Nissan, la marca que salta ahora a la palestra para hablar de su fábrica y el Brexit es Mini. La marca, perteneciente al Grupo BMW, tiene una fábrica en Oxford en la que se producen varios de sus modelos. Sin embargo Mini también cuenta con otros centros productivos (propios o sub contratados) fuera de Reino Unido, como en Países Bajos y Austria.
En este caso Oliver Zipse, jefe de producción del Grupo BMW, ha aclarado que todavía no han decidido si trasladar la producción de Mini a otra planta europea. Según Zipse todavía no hay una razón con fundamento para llevar a cabo este cambio estratégico. Además, puntualiza que aunque se haya dado el sí al Brexit todavía no se conocen las consecuencias económicas que traerá la ruptura con la Unión Europea.
Mini, por ahora, se limitará a esperar a ver qué pasa con el Brexit y la economía de Reino Unido para tomar una decisión. Por lo pronto sus modelos son lo