La parte de medio oriente de nuestro mundo está viviendo unas horas terribles. Sin embargo hay sectores de la economía que parecen nadar a contra corriente y que aguantan todo lo que les echen encima. Uno de los países que peor lo está pasando es Irán ya que aún no acaba de verse libre del fantasma de la guerra. No obstante contra todo pronóstico su sector del automóvil parece que va a mejor ritmo del que se podría esperar a tenor de la situación del país.
Esta situación es la que a hecho que algunas marcas, como el Grupo PSA, vuelvan al país después de un tiempo de impasse. En otro lugar tenemos a marcas que estaban presentes de forma irregular y ahora quieren establecerse en el país para crear una relación duradera. Esta marca es Renault y gracias a un acuerdo firmado con la Organización de Desarrollo y Renovación Industrial de Irán (IDRO) fabricará algunos de sus modelos en tierra iraní.
Debemos recordar que la marca del rombo está presente en Irán desde el pasado año 2003. Para ello estableció acuerdos con las marcas locales Saipa e Irán Khodro. Sin embargo la situación de inestabilidad que vive el gobierno y las sanciones impuestas a Irán por parte de la comunidad internacional habían impedido la expansión en ventas que esperaban en la marca. En todo este tiempo Renault junto a sus socios sólo han fabricado unos 500.000 coches.
Por ello se ha llevado a cabo este nuevo acuerdo que se cimentará sobre una nueva joint venture y un compromiso de inversión conjunta entre las dos socios. Por una parte IDRO proporcionará a Renault la red de distribución que ella no tiene en el país y por otra parte Renault proporcionará a IDRO una nueva fábrica con capacidad para ensamblar 150.000 vehículos y un centro de ingeniería