Recientemente hemos conocido algunos datos técnicos del Mercedes-AMG E63 que pronto estará disponible en el mercado. Tomando la carrocería del Mercedes Clase E, el E63 de AMG incluye, como es habitual, varios cambios estéticos y unas claras mejoras dinámicas que elevan su potencia por encima de los 600 CV, 612 concretamente, y el par motor hasta los 850 Nm. Además, exclusivamente se comercializará con tracción integral, aunque cuenta con un “drift mode” que desactiva el eje delantero.
Aunque el Mercedes-AMG E63 sea una auténtica bestia, al lado de este Brabus E63 850 Biturbo realizado a partir de la generación anterior, no es más que un domesticado minino. Sí, su denominación 850 corresponde a su cifra de potencia, 850 CV que se envían exclusivamente al eje posterior. Esta unidad se encuentra a la venta por 160.000 dólares (unos 142.000 euros), y aunque no cuente con toda la tecnología del nuevo E63, tiene casi 250 CV más y una estética más “alocada”.
Es obligatorio hablar de las prestaciones de esta unidad convenientemente preparada por Brabus. Empezamos por el 0 a 100 km/h, que se cubre en solo uno, dos, tres… ya. Solo necesita 3,1 segundos, mientras que el nuevo E63 necesitará dos décimas de segundo más. Por otro lado, la velocidad punta del Brabus E63 850 Biturbo es de 350 km/h, mientras que el modelo estándar se queda en “solo” 300 km/h. Esto significa que la joya de Brabus es capaz de medirse en un pulso con cualquier superdeportivo italiano.
Tenemos que reconocerlo, este coche es una auténtica locura. “Meter” 850 CV y 1.450 Nm en una berlina concebida originalmente buscando confort y un gran rodaje en vías rápidas solo está en las manos de unos pocos. Sinceramente, y por mucha locura que sea, no me importaría verlo cada mañana en el garaje. Eso sí,