Todos sabemos lo importante que es la seguridad en un automóvil y para conocerla contamos con las pruebas de choque que realizan organismos tan importantes como EuroNCAP en Europa, o LatinNCAP en América Latina. Gracias a estas sabemos si un coche es más o menos seguro y sobre todo si su fabricante nos puede garantizar un mínimo de supervivencia si sufrimos un accidente de tráfico.
LatinNCAP va a cerrar el año sometiendo a sus pruebas de choque a los Nissan Versa y March (nuestro Micra). Parece que este organismo se ha obsesionado con la firma nipona ya que últimamente sus crash test son los que mayor publicidad tienen. Además, parece que Nissan no acaba de hacer las cosas del todo bien ya que se han estrellado (valga la redundancia) en casi todas las pruebas que han realizado con sus modelos.
El fracaso más sonado fue el que sufrió con el Tsuru. La berlina que la marca comercializa (aún sigue a la venta) en México era un auténtico ataúd con ruedas (te lo digo con conocimiento de causa). Su anticuada estructura (basada en un coche de los años 80) y escasos sistemas de seguridad, sumados a que lleva en el mercado unos 30 años hicieron que fuera catalogada como la berlina más insegura del mundo.
Hace un par de meses el organismo realizó las pruebas de choque pertinentes al Nissan Versa que se fabrica en Brasil y el resultado fue de cuatro estrellas. Sin embargo ahora le ha tocado el turno al que se fabrica en México y para colmo de males ha resultado que es más inseguro que su hermano carioca. Según los responsables de LatinNCAP la estructura y los sistemas de retención no son los mismos y por tanto el resultado de las pruebas tampoco puede ser el mismo.
Esta misma situación la