Hace un par de meses llegó el Mazda3 2017, un lavado de cara de mitad de ciclo para el compacto japonés. La renovación aparentemente era bastante leve, pero hay un refrán que dice que ‘los pequeños detalles son los que marcan la diferencia‘. Y lo hemos podido comprobar de primera mano probando este vehículo del segmento C durante su presentación en Barcelona y alrededores. También hemos visto que sigue siendo un modelo importante para Mazda.
Aunque su lanzamiento haya estado un poco eclipsado por el del Mazda CX-5 2017, el Mazda3 será el tercer pilar de la marca si hablamos de ventas en España. Tras el auge de los SUV, ocupará el podio por detrás de los CX-5 y CX-3 que venden 6.591 y 4.356 unidades respectivamente en 2016. El Mazda3 se queda en 3.599 unidades, algo que espera mantener con esta actualización que probamos y analizamos.
Pequeña actualización exterior
Mazda en general y el Mazda3 2017 en concreto, tienen el lenguaje de diseño KODO corriendo por sus venas. En este caso han considerado que no era necesario hacer muchos cambios estéticos en su exterior. Así que nos encontramos al compacto con unos pocos retoques que le harán estar al día. Destacará sobre todo por su frontal, que incorpora una nueva parrilla delantera que aporta mayor dinamismo al conjunto.
Está bordeada por su inferior y laterales por una moldura cromada que conecta con los faros delanteros. Estos también tienen un nuevo diseño, más afilados que en su antecesor. Son LED, al igual que las luces diurnas que son una pequeña línea horizontal en la parte inferior de ambos laterales. De perfil podremos destacar que el Mazda3 irá calzado con un nuevo diseño de llantas de 18 pulgadas en los acabados superiores y que ya incluye intermitentes integrados en los retrovisores.
En la zaga los cambios son menos notorios