Las carreteras de medio mundo se han tenido que adaptar a la evolución que han sufrido los coches. De ser caminos de tierra sin mayor protección a las actuales autovías y autopistas hay un gran trecho. Uno de los principales elementos de seguridad que podemos encontrar en ellas son los quita miedo o guardarraíles (como gusten llamarles). Estas vallas de metal evitan (en la medida de lo posible) que en caso de salirnos de la vía con nuestro coche acabemos más allá de la China.
Los guardarraíles tienen puntos positivos como negativos. Entre los positivos están que evitan que en un choque a baja velocidad salgamos de la vía y podamos impactar contra un obstáculo mayor o que impidan que podamos caer a uno hondonada si se diera el caso. Como punto negativo tiene que puede causar más heridas o lesiones que si no estuviera o si fuera de otro material.
Los que gustamos de pasear con nuestras motos por carreteras de montaña tenemos pánico a caernos y deslizarnos bajo sus cuchillas ya que podríamos perder una de nuestras extremidades de forma perpetua. Por petición popular, en cuestión de unos años los guardarraíles han evolucionado para ser menos peligrosos y hoy os queremos enseñar el que ha inventado una empresa surcoreana llamada Evolution in Traffic Innovation (ETI).
Éste nuevo guardarríl está formado por un conjunto de cilindros fabricados en un material flexible (etivinilacetato) que hace rebotar al vehículo que impacta sobre ellos. El nuevo Roller System, como ha sido denominado este nuevo sistema de retención vial, incorpora entre sus dos vigas estos cilindros que hacen que cuando el coche impacte sobre él, salga despedido. En este vídeo, realizado en Australia, podemos ver cómo funcionan estos nuevos guardarraíles flexibles.
Según sus creadores, este guardarraíl flexible tiene un coste de mantenimiento muy bajo ya que estos