El otro día os contábamos que Tesla estaba trabajando día y noche durante los siete días de la semana para tener lista la última actualización de su sistema Autopilot. Esta información la proporcionaba el propio Elon Musk a través de su cuenta personal (profesional) de Twitter. Sin embargo, poco después saltó la noticia de que muy probablemente esta última evolución no podría llegar a todos los modelos que Tesla ha comercializado en los últimos cuatro años.
La razón también os la explicamos y se sustenta en que los modelos más antiguos no incorporan el mismo grado tecnológico que los últimos y ésto les hace menos útiles a nivel tecnológico. Sin embargo los ingenieros de la marca ya tienen lista la última actualización y en breves días será instalada en los vehículos. El problema que surge en esta ocasión es que parece que no todos los modelos serán llamados para que invitarles a incluir la última versión de este sistema de conducción “semi autónomo”.
El fundador de la firma habría comunicado que unos 1.000 modelos (entre todos los que tiene ahora a la venta) habrían sido llamados para instalar la versión de prueba del nuevo Autopilot. Cuando ésta haya sido testada y se comprueben que las mejoras introducidas son realmente seguras se pasará en una segunda fase a llamar al resto de dueños de vehículos para que lo incluyan si así lo desean.
Según la marca estos coches deberían contar con la evolución de Autopilot para el día 5 de enero y los demás, una vez finalice el periodo de pruebas. Desde aquí entendemos que este retraso es normal ya que los nuevos modelos de la firma han mejorado sustancialmente sus capacidades tecnológicas respecto a los primeros y por tanto están mejor preparados para recibir cualquier actualización.
Por el momento la compañía está trabajando para