Las negociaciones para que el Grupo PSA se haga con Opel y Vauxhall siguen su curso. Según un comunicado oficial de los franceses tanto “General Motors como PSA Group examinan regularmente posibilidades adicionales de expansión y cooperación“ además también ha aclarado que “junto con General Motors, está explorando numerosas iniciativas estratégicas con el objetivo de mejorar su rentabilidad y eficiencia operativa, incluyendo una posible adquisición de Opel (Vauxhall)”.
Estas declaraciones parecen querernos decir que los tratos están avanzando, sin embargo, para evitar problemas de última hora, PSA también ha aclarado que “no hay seguridad de que se llegue a un acuerdo final”. Pues bien, mientras todo esto está pasando, se oyen rumores que hablan sobre el cierre de fábricas y plantas productivas en media Europa.
Se informó tras conocerse las conversaciones entre General Motors y PSA que el grupo francés se comprometía a no cerrar ninguna de las cuatro fábricas que tiene Opel en Alemania. Tras hacerse pública esta información las alarmas saltaron en Reino Unido pues Vauxhall posee allí dos plantas que sí podrían ser cerradas cuando PSA se haga con el control de Opel.
En Europa General Motors cuenta con nueve fábricas, casi todas dedicadas en exclusiva a Opel. Según la agencia de noticias Reuters para que el Grupo PSA pueda obtener beneficios tras la adquisición de las firmas alemana e inglesa debería recortar la producción y el empleo en la mitad de las plantas europeas. Esto dejaría a las que tiene en Reino Unido fuera de juego y por tanto la pérdida de empleos en el sector del automóvil inglés sería muy importante.
En las fábricas de Ellesmere Port y Luton, actualmente trabajan unos 4.500 empleados directamente. Sin embargo no sólo son estos puestos los que están en peligro, ya que se crean muchos puestos indirectos en todo el país. No