Parece mentira, pero hace ya una década que llegó la última generación del Fiat 500 a nuestras vidas. El pequeño urbano de la casa italiana se convirtió en un fenómeno de masas en poco tiempo y con mínimos cambios ha llegado a nuestros días. No obstante, los directivos de Fiat Chrysler Automóbiles (FCA) saben que deben darle relevo generacional y en ello están trabajando.
Es cuestión de meses (o un año) que se presente de forma oficial la segunda generación de este modelo. A nivel estético sabemos que no podrá sufrir muchos cambios pues deben mantener la esencia del modelo actual si quieren seguir triunfando con él. Sin embargo, bajo el capot delantero si que llegarán cambios ya que las estrictas normativas anti contaminación pondrán en un brete a los fabricantes de coches.
Según hemos podido saber, Sergio Marchionne ha declarado que la próxima generación del Fiat 500 contará con un sistema “Mild Hybrid System”. Con él, esperan aparcar para siempre la motorización diésel 1.3 MultiJet con 95 cv que tiene la actual generación. De llegar este sistema, las emisiones y consumos del pequeño coche italiano caerían a niveles más bajos e incluso podría mejorar sus ventas si los clientes ven en él un aliado para las grandes ciudades.
Este sistema híbrido contaría con un esquema eléctrico de apoyo con 48 voltios y ayudaría a los bloques gasolina en los momentos en que el conductor demande más potencia. Esta hibridación suave que estrenaría el 500 también podría llegar al Panda, pues al compartir plataforma y órganos mecánicos no sería descabellado. Con él, ahorrarían en costes de desarrollo y a la vez mejorarían los datos de consumo de ambos modelos.
La razón que ha dado Sergio Marchionne para apostar por esta tecnología es que al ser ambos modelos de pequeñas dimensiones, emplear una motorización híbrida