De forma oficial el Brexit se iniciará mañana día 29. La Primera Ministra Theresa May enviará una misiva a sus ex socios europeos para activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa. Cuando esto suceda no habrá vuelta atrás, ni para los ingleses que decidieron irse de la Unión Europea ni para las empresas que tienen fuertes intereses económicos en el país.
Si las negociaciones para la desconexión de la Unión Europea son estratégicamente tratadas, puede que Reino Unido no sufra mucho las consecuencias. Uno de los sectores económicos del país que peor lo podría pasar es el del automóvil pues la fabricación de coches en suelo británico es muy importante para su PIB.
El problema de todo está en ver si la Unión Europea decide cerrarle las puertas de los tratados de libre comercio y establece aranceles a los productos que salgan del país. Para tratar de averiguar cómo podría afectar esta situación a la fabricación de coches en Reino Unido, PA Consulting Group han decidido hacer una investigación y sus conclusiones son muy esclarecedoras.
Según los cálculos que han realizado los responsables del estudio de PA, la fabricación de coches en el país podría verse encarecida. Las marcas de coches tendrían que lidiar con tasas a ciertas partes que no se fabrican en el país y como es lógico este incremento en el precio de los componentes hará que se incremente el precio final por cada unidad producida.
Los números son claros, si el Brexit se lleva por la parte dura, el incremento de precios en la fabricación de coches estará situado en los 2.730 euros. Como es lógico, esta subida de precios se trasladaría a los clientes finales y como consecuencia, la demanda interna del país sufriría, pues los clientes no estarían dispuestos a pagar esta demasía.
Una vez conocemos los datos