El fabricante italiano Lancia es el mejor ejemplo actual de cómo una marca pasa de haber sido un icono en deportividad, diseño y calidad a estar con un pie en la tumba. Lancia ha sido una marca incomprendida en gran parte de los mercados en los que ha estado presente durante las dos últimas décadas y ello ha provocado que sus ventas estén cada vez más bajas.
Según anunció hace un par de años Sergio Marchionne, CEO de Fiat Chrysler Automóbiles (FCA), Lancia es una marca (actualmente) sin futuro en el grupo y por ello su muerte está más que confirmada. Sin embargo, el único modelo de la firma que ha tenido éxito es el Ypsilon y como en Italia sigue siendo uno de los modelos más vendidos, Lancia le estira la vida mediante versiones y ediciones especiales.
El Ypsilon es un coche para mujeres (no me gustan los tópicos, pero es así) y las italianas se vuelven locas por él. Por ello, Lancia ha presentado la edición especial “Unyca” de su pequeño urbano. En ella destaca la decoración exterior en colores específicos y una dotación de serie bastante completa para el segmento (aunque no incorpora los últimos avances en asistentes a la seguridad).
Exteriormente los Ypsilon Unyca se pueden reconocer por el color de su carrocería, pues sólo está disponible en color azul o blanco. Ambas opciones quedan completadas por detalles en color negro, como los retrovisores o las llantas de aleación. Además, para remarcar su carácter único, sobre el pilar B cuenta con un adhesivo que imita a los bordados de la tapicería.
Si pasamos a su interior, tenemos que el salpicadero y la tapicería (de diseño exclusivo para esta edición especial) cuentan con elementos en color negro y azul. En el aspecto del equipamiento, el Ypsilon monta de serie climatizador automático,