Nos espera una auténtica revolución en cuanto a movilidad se refiere. Todo cambiará, a largo plazo, con los vehículos eléctricos y también con la automatización de la conducción. Para la conducción totalmente autónoma quedan muchos años de desarrollo y pruebas, pero los coches eléctricos cada día, y poco a poco, serán más frecuentes. Mercedes tenía el objetivo de lanzar 10 nuevos modelos eléctricos de aquí a 2025, pero parece ser que este proyecto se adelantará.
La firma alemana de la estrella ha revisado sus planes y, viendo que podrían llegar al objetivo en menos tiempo del esperado, han decidido adelantar su fecha límite; concretamente 3 años. De este modo, todo parece indicar que la gama “EV” de 10 modelos estará disponible en el año 2022. Los fabricantes quieren reducir emisiones (están “obligados”) a toda costa y adelantarse al futuro, de modo que los coches diésel serán los peor parados en este sentido.
No queremos decir que los propulsores alimentados por gasoil vayan a desaparecer de un momento a otro, habrá un periodo de transición, pero poco a poco irán reduciendo su oferta y lanzando híbridos enchufables (plug-in). Como es lógico, los motores que funcionan con diésel se irán reduciendo empezando por los vehículos urbanos, los más pequeños. Cada vez hay menos modelos del segmento A que recurren a propulsores diésel y la tendencia será que los del segmento B sigan la misma línea.
Como bien ha declarado recientemente Dieter Zetsche, mandamás en Daimler, “es necesario hacer una cosa sin detener la otra”, refiriéndose precisamente a esa transición, “por eso estamos fortaleciendo tanto lo nuevo como lo antiguo”. Por mucho que nos duela, el futuro es claro y cada vez iremos viendo más vehículos propulsados por sistemas eléctricos en nuestras calles y carreteras. Poco a poco la investigación y los desarrollos permitirán una mayor