Mucho estamos hablando en los últimos meses del Mercedes-AMG Project One, el hiperdeportivo que pronto conoceremos; un coche de competición pero homologado para la circulación por las vías públicas. La última noticia que tuvimos de él es que su mecánica sería capaz de subir a las 11.000 revoluciones por minuto, aunque se estima una vida aproximada de 50.000 kilómetros, lo que tampoco es algo por lo que echarse a llorar.
Este proyecto, nunca mejor dicho, se sale de toda norma. Será difícil que podamos ver alguna unidad en persona puesto que su comercialización será muy reducida. De todos modos, si tenéis la oportunidad de verlo en alguna ocasión, fijaos en sus puertas. El jefe de diseño de Mercedes, Gorden Wagener, ha declarado que este coche no llevará unas puertas convencionales, lo que hace soñar a muchos con unas puertas de apertura “alas de gaviota” al más puro estilo Mercedes 300 SL o SLS AMG.
Este tipo de puertas ha sido utilizado en algunos de los modelos más míticos y avanzados a su tiempo de Mercedes, como los dos anteriormente citados. Sin embargo, uno de los objetivos fundamentales para cualquier hiperdeportivo es la ligereza, algo que no se lleva muy bien con las “alas de gaviota” por su mecanismo de apertura. No pesa cientos de kilos, pero cada gramo cuenta en este tipo de vehículos tan enfocados al máximo rendimiento de circuito llevado a la calle.
Tampoco nos extrañaría que Mercedes hubiera diseñado para su Project One algún tipo de mecanismo revolucionario que no aumentara demasiado su peso. También, el equipo de diseño declaraba a nuestros compañeros de Motoring que habrá “muchas partes del exterior provenientes de las carreras de Formula 1”. Añadieron sobre el interior que “es increíble. Es compacto, es radical, la posición del asiento casi en el suelo y los asientos