Dicen que el límite de los coches de tracción delantera está en unos 250 CV. Coches como los Honda Civic Type R o Volkswagen Golf GTI Clubsport S nos han demostrado que el límite digestivo de la tracción delantera es aún superior, siempre y cuando se instale un buen autoblocante y se ponga a punto el chasis de forma muy concienzuda. El caso que os quiero enseñar hoy rompe todos los límites habidos y por haber: es un Peugeot 106 de tracción delantera, al que han instalado un motor sobrealimentado de 500 CV de potencia. Como es previsible, el pequeño francés vive en una lucha constante por una tracción inexistente.
El turbo es tan grande que han tenido que cortar un agujero en el capó. Lo mismo ocurre con su válvula de descarga y el escape.
No hay muchos datos acerca de esta creación, que el youtuber NM2255 Car HD ha descubierto en el circuito de Franciacorta, en el evento Time Attack Italia. Por lo que se puede ver, equipa un motor de cuatro cilindros y 1,6 litros, que ha sido sobrealimentado por un enorme turbocompresor hasta los 500 CV. Hasta donde se puede ver, incluso podríamos estar hablando de un Peugeot 106 Maxi Kit Car, y su potencia seguiría siendo desmesurada. Con un peso de apenas 800 kilos – instala todos los autoblocantes que quieras – la potencia es imposile de digerir para el tren delantero del pequeño Peugeot.
Cada aceleración se convierte en una lucha constante con el volante, hasta el punto de que incluso desde fuera, el coche se ve claramente desbocado. En el vídeo que recogemos sobre estas líneas podéis certificar perfectamente mis palabras. Al final del vídeo onboard se ve cómo incluso el piloto trata de cambiar de marcha antes de tiempo, tratando de evitar el torrente