Reducir los costes a la hora de diseñar y desarrollar un nuevo vehículo es algo que todas las marcas de coches quieren. A medida que la tecnología ha evolucionado y se ha incorporado en los coches los costes se han disparado. Además, las medidas de seguridad y anti contaminación están obligando a que el desarrollo de nuevos motores y sistemas de seguridad ocupen cada vez más protagonismo en los presupuestos de las firmas.
El máximo exponente en cuanto a ahorro de costes al compartir plataformas modulares lo representa el Grupo Volkswagen AG. Sin embargo, el resto de grupos industriales se están poniendo las pilas, pues Toyota ya tiene operativa su TNGA y el Grupo PSA emplea la avanzada EMP. A otro ritmo van otras marcas como Ford que a pesar de tener su plataforma modular para modelos grandes (Mondeo) aún no tiene una para los segmentos pequeño y compacto.
A nivel mundial el grueso de las ventas de Ford están concentradas en los Fiesta y Focus. La nueva generación del Fiesta llegará a las calles en breve y la próxima generación del compacto de la casa del óvalo azul debería llegar a las calles para el año 2019 o 2020. Su llegada al mercado es el motivo por el que Ford ha comunicado oficialmente que ya están ultimando el desarrollo de su nueva plataforma modular para vehículos pequeños y compactos.
Esta plataforma ha sido desarrollada para dar cabida a varios modelos de varios segmentos entre los que se incluirán el próximo Focus, C-MAX, Kuga y demás modelos. Además, permitirá a los modelos de Ford emplear varios sistemas de propulsión entre los que tendremos motores diésel, gasolina, híbridos y eléctricos. Todo ello estará complementado por la posibilidad de incorporar los últimos avances en cuanto a tecnología para la conducción autónoma.
Según han comentado en la