Desde que fuera presentada la nueva generación del Volvo XC60 el fabricante sueco está trabajando a marchas forzadas para tenerlo en la calle lo antes posible. La primera generación de este SUV medio ha sido un éxito para la casa de Gotemburgo y por ello tienen muchas esperanzas en la segunda. Como prueba, desde el año 2008, momento en que llegó al mercado se han vendido casi un millón de unidades en todo el mundo.
Además, no es que sea uno de los modelos más vendidos de la marca en el mundo, sino que es el SUV mediano premium más vendido de Europa. Durante el pasado año 2016 colocó en el mercado continental 84.502 unidades frente a las 73.660 unidades del Audi Q5, 50.572 unidades del BMW X3 y las 73.191 unidades del Mercedes-Benz GLC. Por ello, los directivos de Volvo y Geely (matriz de la marca) se juegan mucho con este modelo.
Para evitar que no quede nada al azar, Volvo ha decidido que el nuevo XC60 siga saliendo de las instalaciones que tienen en la ciudad sueca Torslanda en Gotemburgo. Este centro es el más importante de la marca y el encargado de la manufactura de forma exclusiva para el mundo (menos para China) de varios modelos. Por ello, la planta ha sufrido una profunda remodelación para adaptar sus líneas productivas a la nueva plataforma SPA que es la que da vida al nuevo XC60.
Según ha informado la marca desde estas instalaciones ya han comenzado a salir las primeras unidades del XC60. Las primeras entregas a sus clientes se realizarán a lo largo del segundo semestre de este año pues han de cubrir la demanda de los principales mercados en los que estará disponible. Sin embargo, Estados Unidos aún tendrá que esperar un poco más, pues su llegada está prevista