La sexta generación del Volkswagen Polo ya está aquí. El modelo, que ha vendido a lo largo de su historia más de 14 millones de unidades, es ahora más grande que nunca, incorpora tecnología propia de segmentos superiores y una gama de motores con opciones gasolina, diésel y de gas natural. Estará a la venta antes de finales de año, aunque de momento no hay precios para España.
En lo que a diseño respecta, no cambia demasiado, aunque sí estrena líneas más musculosas, una nueva mirada gracias a grupos ópticos de nuevo diseño (Full LED en opción) y pilotos LED revisados. Es más largo, bajo y ancho que antes. Estará disponible con 14 colores de carrocería, 12 diseños de llantas, 11 tapicerías y 13 molduras decorativas diferentes para el habitáculo.
Este Polo 2018, basado sobre la plataforma MQB A0 y de momento presentado únicamente en carroceria de cinco puertas, mide 4,05 metros de largo (el anterior 3,97 metros), 1,75 metros de ancho y 1,45 metros de alto. Además, tiene una batalla 9 centímetros mayor, que llega a los 2,56 metros. También hay un importante salto en capacidad del maletero, que ahora es de 351 litros (antes «sólo» 280 litros).
A nivel interior destaca el nuevo cuadro de instrumentos completamente digital o Active Info Display de segunda generación (que ya lleva por ejemplo el Golf), un gran techo panorámico de cristal y tecnología como carga inalámbrica (sin cables) para el teléfono móvil o diversos asistentes de conducción: control de crucero adaptativo, asistente de ángulo muerto, asistente de aparcamiento, acceso y arranque sin llave, etc…
La oferta de motores incluye opciones tricilíndricas de gasolina como el 1.0 MPI de 65 ó 75 CV y un 1.0 TSI de 95 y 115 CV, el nuevo 1.5 TSI Evo de 150 CV, un bloque diésel de 1.6