Hyundai ya está totalmente asentada en Europa. Hace muy pocos años hablar de Hyundai era hablar de una marca coreana lowcost, algo similar a lo que ocurría con Kia. Sin embargo, en estos tiempos debemos quitarnos el sombrero ante ambas. Hyundai ha sabido consolidarse como una marca generalista que ofrece unos productos muy acertados para lo que el público demanda. Hoy la firma asiática muestra el primer modelo de su línea deportiva N, el Hyundai i30 N.
El Hyundai i30 N lleva meses y meses gestándose y poniéndose a punto en circuito, en el de Nürburgring concretamente, para que Hyundai llegue a los corazones de un público particular, el de los aficionados a los GTI. Así nace el i30 N, el primer producto de altas prestaciones de la casa coreana. Dice Hyundai que este nuevo producto se inspira en la experiencia conseguida en el WRC desde 2014. Vamos a descubrirlo a fondo y a ver si realmente han creado un GTI de verdad.
Así se viste por fuera el Hyundai i30 N
A finales del pasado año conocimos en primera persona y nos pusimos a los mandos del i30 de tercera generación (y más tarde la versión familiar CW). Comparando este Hyundai i30 N con el modelo normal, vemos varios detalles que nos hacen distinguirlo a golpe de vista. Aunque tampoco es un cambio radical como, por ejemplo, ocurre con el Focus RS; este deportivo compacto sabe llamar la atención con su estética.
En el frontal aparece un nuevo paragolpes con formas más agudas y mayores superficies para canalizar el aire hacia el vano motor. En su parte baja aparece un pequeño spoiler que también incorpora una fina línea de color rojo. En la parrilla principal presume de su nueva filial deportiva y de versión, mostrando con orgullo la letra “N”.
Cambiando a la vista lateral